
"Hay brujas para todos los gustos: están las modernas, que se conectan a Internet y aprenden nigromancia en cursillos on line; las despistadas, que transforman príncipes en huevos fritos, en vez de en sapos; o las novatas, que acaban de sacarse el carné de conducir escobas, y son el terror del espacio... "

"En este libro, brujas y brujos lucen sus modelitos de tela de araña en la Pasarela Brujeles, compran su cedé de gemidos y aullidos (número uno en los Cuarenta Principales) en el Híper Brujesco, o hacen pociones de baba de babosa y rabos de rata peluda en remojo."

"El libro de las brujas destaca por su actualidad, su cercanía a los intereses infantiles y su sentido del humor. Es un instrumento eficaz de animación a la lectura; un libro que nunca se acaba (cuantas más veces se lee, más se disfruta): ¡Los lectores acabaran por aprenderse sus poemas de memoria!; un recurso ideal para que bibliotecarios y animadores puedan acercar de forma divertida la poesía a los niños, y transmitir valores como la igualdad o el respeto a las diferencias."

